La poesía me salva. Pero no es gratis ese milagro. La pago minuto a minuto con la aceptación obscena de mis temores y mis deseos. (Valeria Pariso)

Cuando llueve vale todo.

Cuando llueve vale todo.
Corazón sin rey.
Casita perdida entre los charcos y el pasto.
Bendito sea el pasto.
Bendita sea tu imagen que me salva del hartazgo.
Horribles serían mis horas sin tu cara.
Más horribles que la palabra VIOLENCIA haciendo dedo en una cuadra de tu alma.

La mano que da vida también mata.

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