La poesía me salva. Pero no es gratis ese milagro. La pago minuto a minuto con la aceptación obscena de mis temores y mis deseos. (Valeria Pariso)

Cuando te me acercaste.

cuando te me acercaste
y pusiste tu dedo en mi hombro izquierdo
y bailaste
yo no sabía quién eras
yo no buscaba olvidarte
yo sólo observaba tu danza
inocente, pura magia, saludable

y repetía en voz alta "sos un árbol"
y decretaban los vientos "va a quebrarte"

No hay comentarios:

Publicar un comentario