Ya me hice el muerto. ¡Y cómo van cayendo los prejuicios!
Las letras, desde su particularidad, se abren paso.
Y mi vida, ante vos, se saca su disfraz.
Chipi chipi, mi verdad.
Vos no me vas a esperar por siempre. Y lo tomo con
calma porque
voy a seguir
y
después quizás tal vez llorar
Yo a los amores los escribo
les pongo una etiqueta de NO USAR
Ya me hice el muerto. Te lo puedo contar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario